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BENEFICIOS DE BAÑARSE CON AGUA FRÍA


Sabemos que cuesta, especialmente en invierno, pero ducharse con agua fría tiene una serie de beneficios para la salud que hacen que bajar la temperatura del agua al entrar en la ducha sea altamente recomendable. Además, con el agua fría las duchas son más cortas, siendo una buena medida para consumir menos litros con cada ducha.


Seguro que habrás visto en más de una ocasión a deportistas meterse en bañeras de agua helada después de entrenar, o te habrás fijado en que en los SPA hay bañeras de agua fría. Esto no es por casualidad ni por gusto, sino porque está demostrado que es bueno ducharse con agua fría, tanto para la piel como para la musculatura, y también para nuestro organismo.


Y no, no solo en verano, pues lo realmente beneficioso es ducharse con agua fría en invierno. Lo que hasta era todo un acto de valentía, seguro que dejará de serlo en cuanto conozcas cómo puede ayudarte meterte en una bañera a baja temperatura.


Por ello, a continuación, te vamos a mostrar los principales beneficios de ducharse con agua fría que harán que te lo pienses en tu próxima ducha.

Por todo esto es bueno ducharse con agua fría:

1. Fortalece el sistema inmune


Uno de los beneficios es los baños con agua fría es que fortalecen el sistema inmune de nuestro cuerpo, activándolo y manteniéndolo alerta ante cualquier agresión externa como bacterias, virus y otros microorganismos que pueden ser perjudiciales.


Un estudio realizado por la revista Plos One entre alrededor de 3.000 personas durante un mes nos mostró que darse una ducha de agua fría diaria de al menos 30 segundos reduce las afecciones, y la prueba está en que el número de bajas laborales durante este tiempo se redujo en un 29%.


2. Acelera la recuperación de los músculos


La razón de bañarse con agua fría después de hacer ejercicio es que la baja temperatura del agua acelera la recuperación muscular, dado que el frío tiene efecto antiinflamatorio. Por ello, los baños de agua fría forman parte de la rutina de los deportistas de elite, especialmente tras los entrenamientos más intensos.


Además del efecto refrescante, el agua fría, al acelerar la recuperación, reduce las molestias y el riesgo de lesión por microrroturas fibrilares o sobrecargas. Si lo piensas, lo primero que hacemos al darnos un golpe es aplicarnos hielo sobre la zona.


3. Activa la circulación


Una de las principales ventajas de ducharse con agua fría es que activa la circulación sanguínea, ya que el frío favorece la contracción de los vasos sanguíneos, lo que ayuda a que la sangre fluya más fluida, proporcionando una mayor cantidad de oxígeno y nutrientes a cada una de las células presentes en nuestro organismo.


El efecto del agua fría aumenta el ritmo cardíaco de forma moderada, lo que es altamente beneficioso para la salud cardiovascular.


4. Despeja y tonifica


No hay nada mejor para despejarse que una buena ducha de agua fría y, si no lo crees, prueba a ducharte con agua fría nada más salir de la cama. Comprobarás como en cuestión de minutos estás totalmente activado y lleno de energía para afrontar el día que tienes por delante.


A esto hay que sumarle que las duchas de agua fría también tonifican, ya que cuando el agua entra en contacto con nuestro cuerpo, el sistema nervioso se activa automáticamente, lo que hace que nuestro cuerpo reaccione tratando de contrarrestar el contraste, provocando una rápida revitalización de todo el organismo.


5. Es bueno para la piel y también para el cabello


Te aseguramos que si te duchas con agua fría diariamente, el estado de tu piel mejorará enormemente, porque el agua a baja temperatura es muy beneficiosa para la dermis, favoreciendo su firmeza y elasticidad.


Así mismo, el agua fría también protege el cabello y lo mantiene hidratado, siendo una excelente opción para no dañarlo, para combatir el encrespamiento y mantenerlo más fuerte. También hay que destacar que ayuda a prevenir otros problemas capilares como la caspa, dado que el agua muy caliente puede irritar y dañar el cuero cabelludo.


6. Mejora el estado de ánimo y la concentración


Al activar el cuerpo, las duchas de agua fría mejoran tanto el estado de ánimo como la concentración, estimulando el cerebro y provocando que genere una mayor cantidad de dopamina y noradrenalina, que son dos importantes neurotransmisores que intervienen directamente en la capacidad de atención y memoria, así como en la regulación del sueño.


7. Combate la celulitis y la retención de líquidos


Para terminar con los beneficios de ducharse con agua fría, destacar que es un excelente remedio contra la celulitis y la retención de líquidos, favoreciendo el buen funcionamiento del sistema linfático, que es el encargado de eliminar los líquidos, las grasas y las toxinas de nuestro organismo.


Después de conocer todos estos beneficios, seguro que estás valorando seriamente la posibilidad de darte duchas de agua fría. ¿Un consejo? Como sabemos que puede ser complicado, especialmente si no estamos acostumbrados, comienza dándote duchas de contraste, combinando el agua caliente con el agua fría, para que así el cuerpo vaya acostumbrándose. Lo ideal es terminar el baño con un chorro de agua fría de al menos 30 segundos.

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